miércoles, 15 de diciembre de 2010

Historia de los Templarios: Cruzadas VII

La Cruzada Declates 

 

Cuando el Sistema Declates se puso en el camino del ¡Waaagh! Gitzmott, mundos enteros cayeron durante la noche. Los Puños Carmesíes se desplegaron rápidamente para parar la sangría y enfrentarse a la amenaza orka. Tras su llegada, el venerable Capítulo consiguió victoria tras victoria con sus ataques rápidos y contundentes. Sin embargo, los Puños Carmesíes empezaron a perder terreno cuando la inmensa invasión orka cayó con todo su peso. Se hizo aparente que se necesitaba ayuda, y rápido. La gigantesca incursión de los orkos iba definitivamente encaminada al Mundo Forja de Declates IV y las densamente pobladas colmenas de Declates V. El Imperio no podía permitir que estos puntos cayeran.


Los Templarios Negros cercanos escucharon la llamada a las armas, y la campaña pronto se equilibró. Fue en Declates VII donde el destino del sistema se determinó. Gitzmott fue localizado y eliminado en las estériles planicies del planeta por un Paladín del Emperador. Sin liderazgo, las fuerzas de Gitzmott perdieron su rumbo y abandonaron el campo de batalla. Desde ahí, fue cuestión de limpiar las dispersas fuerzas alienígenas. Ambos Capítulos sufrieron espantosas pérdidas ya que eran superados en número, a menudo en 5 a 1. A pesar de estas dificultades, los dos Capítulos consiguieron renombre en el campo de batalla y héroes del Sistema Declates para siempre.