sábado, 18 de diciembre de 2010

Historia de los Templarios: Cruzadas IX

La Cruzada de Geonide

 


Geonide es un planeta notablemente valioso debido a las investigaciones científicas realizadas en los laboratorios sembrados por toda la superficie del planeta. Brillantes mentes del Adeptus Mechanicus trabajan fervientemente en importantes proyectos como nuevas propulsiones para la Armada Imperial y las últimas tecnologías láser. Allí hay proyectos clasificados que involucran artefactos y reliquias de eras pasadas. Sea cual sea el trabajo, todo se hace en interés de la causa del Emperador. Sin embargo, subyacente a toda esta investigación aprobada, está la posibilidad de que alguien quiera hurgar en tramas heréticas fuera de los límites impuestos por el Imperio.

Estallaron rebeliones en las mayores ciudades de Geonide sin previo aviso, tomando buena cuenta de la población y de las valiosísimas instalaciones de investigación. Mucho tiempo después, se reveló que el verdadero cáncer del descontento fue un nuevo aquelarre de Psíquicos latentes infectados por las mentiras del Caos. Estos científicos renegados habían sido utilizados como marionetas para desatar las paganas energías de la disformidad para abrir una brecha a la realidad.

En un año, el 75% de la población cayó bajo la disforme influencia del Caos y un ejército de retorcidos humanos marchó junto a Demonios y criaturas aún más despreciables. Tras agotar todos los métodos para reclamar el planeta, se pidió finalmente el Exterminatus por los elementos siempre presentes de la Inquisición durante la campaña. Sin embargo, fueron frenados por los valientes Templarios Negros que aprovecharon para recuperar artefactos valiosísimos, documentos de investigación y evitaron que importante personal Imperial fuera tragado para siempre por los poderes ruinosos.

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